La Ley de Segunda Oportunidad se ha vuelto en España una excelente forma de pagar deudas cuando no tienes el capital, pero que tiene un trasfondo legal un poco amplio. Primero que todo, tiene algunos requisitos obligatorios, así como algunas situaciones en las que no te puedes acoger. En este artículo, te contamos los errores que no debes cometer al acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad.
La Ley de Segunda Oportunidad es un proceso amplio, con muchas vertientes y un montón de variables a considerar. Por esto, lo mejor es contar con un servicio de asesoría especializado en Ley de Segunda Oportunidad. A veces, renacer es la única opción que te queda, y esto puede ser posible de manera efectiva, contando con la mejor asesoría.
¿Cuáles son los requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad?
Como has podido ver, la Ley de Segunda Oportunidad permite borrar absolutamente todas tus deudas, con la condición de perder todo tu patrimonio. Es por esto que acogerse a la ley de algo propio de las personas cuyo patrimonio neto no funciona para pagar la totalidad de sus deudas. Además de este, existen otros requisitos a tener en cuenta.
El primero de ellos es tener deudas de buena fe. Este es un concepto jurídico igual de complejo que el mecanismo completo.
De forma resumida, un deudor de buena fe es aquel que está libre de procesos judiciales, que haya intentado solventar las deudas, y que por supuesto, no haya caído en deuda debido a delitos contra el patrimonio.
Además, de esto, el total de las deudas no puede ser equivalente a más de 5 millones de euros. También es necesario que se demuestre que el total del patrimonio del deudor no es suficiente para pagar la totalidad de las deudas.
Por último, es necesario no haberse acogido a la Ley en los últimos 5 años, o bien 2 años en el caso de haber acordado un plan de pagos y que éste ya haya finalizado.
Errores que impiden el uso de la Ley de Segunda Oportunidad
Existen muchas formas de conseguir la Ley de Segunda Oportunidad con éxito. Sin embargo, también existen algunos errores que no debes cometer al acogerte a este mecanismo.
Esconder signos de mala fe
El primero de los requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad es ser deudor de buena fe. Como has podido ver, esto significa cumplir con otra serie de requisitos un tanto amplios. Lo mejor cuando eres deudos de mala fe, es que ni siquiera solicites la Ley de Segunda Oportunidad.
Este tipo de deudas son fáciles de detectar, y el fraude en este proceso puede hacer que seas vetado de por vida de acogerte a este mecanismo legal. Si no cumples el principal requisito, entonces esta Ley no puede ayudarte.
Irrespetar el tiempo del proceso
Muchas veces, los nervios nos pueden ganar. Tener una deuda de unos cuantos años puede ser frustrante, y los intereses pueden hacernos sentir peor. Esto hace que algunas personas actúen sin pensar y, sobre todo, sin recibir asesoría.
Actuar sin un proceso de análisis, y también apurando el proceso, también es uno de los errores al acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad. Es por esto que necesitas un equipo de asesores especializados, que te permita un análisis completo de tu situación, para planificar el mecanismo a tu favor.
No asesorarte
El asesoramiento en este tipo de procesos es importante. Futuro sin Deudas es una red de profesionales que pueden ayudarte a no cometer errores en la Ley de Segunda Oportunidad.
El proceso es complicado, pero con la ayuda correcta, se vuelve algo sencillo, con algunos trámites de más. Te invitamos a contactar a Futuro sin Deudas, y planificar el renacer de tu economía con un grupo de profesionales.
El primero de los requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad es ser deudor de buena fe. Como has podido ver, esto significa cumplir con otra serie de requisitos un tanto amplios. Lo mejor cuando eres deudos de mala fe, es que ni siquiera solicites la Ley de Segunda Oportunidad.
Este tipo de deudas son fáciles de detectar, y el fraude en este proceso puede hacer que seas vetado de por vida de acogerte a este mecanismo legal. Si no cumples el principal requisito, entonces esta Ley no puede ayudarte.
Irrespetar el tiempo del proceso
Muchas veces, los nervios nos pueden ganar. Tener una deuda de unos cuantos años puede ser frustrante, y los intereses pueden hacernos sentir peor. Esto hace que algunas personas actúen sin pensar y, sobre todo, sin recibir asesoría.
Actuar sin un proceso de análisis, y también apurando el proceso, también es uno de los errores al acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad. Es por esto que necesitas un equipo de asesores especializados, que te permita un análisis completo de tu situación, para planificar el mecanismo a tu favor.
No asesorarte
El asesoramiento en este tipo de procesos es importante. Futuro sin Deudas es una red de profesionales que pueden ayudarte a no cometer errores en la Ley de Segunda Oportunidad.
El proceso es complicado, pero con la ayuda correcta, se vuelve algo sencillo, con algunos trámites de más. Te invitamos a contactar a Futuro sin Deudas, y planificar el renacer de tu economía con un grupo de profesionales.
